jueves, 21 de junio de 2012

TIPOS DE FRENADAS....


TIPOS DE FRENADAS....

Tipos de frenada:

1 – Frenada de detención.
2 – Frenada de aproximación.
3 – Frenada de reducción.
4 - Frenada preventiva.
5 – Frenada de corrección de trazada.
6 – Frenada de tanteo de adherencia.
7 – Frenada de emergencia prevista.
8 – Frenada de emergencia imprevista.
9 – Frenada de calentamiento.
10 – Frenada de entrenamiento.
11 – Frenada reflejo de otra.
12 – Frenada de ensayo.
13 – Frenada de secado.
14 – Frenada de aviso al de atrás.
15 – Frenada de adecuación a la velocidad legal (radar).
16 – Frenada de situación de parada.

 


1 – Frenada de detención. Es la que se practica habitualmente para detener la moto, por ejemplo, en un semáforo. Se hace preferentemente con los dos frenos, aunque yendo despacio por ciudad puede ser más cómodo hacerlo con el trasero, salvo los últimos metros en que al bajar el pie para apoyarse, hay que hacerlo con el delantero.
No tiene más secreto que hacerla a tiempo y calcular la progresión de la frenada para
que sea suave.

2 – Frenada de aproximación. Cuando vamos rápido por una recta y llega una curva, por seguridad puede ser conveniente frenar en dos tramos, así es mucho más difícil equivocarnos en el cálculo de la frenada y es además más cómodo. Es decir, antes de llegar hacemos una frenada, soltamos frenos un poco, y volvemos a frenar ya a menos velocidad y en la entrada de la curva. Esto es especialmente adecuado en mojado o en
superficies poco adherentes, y en las bajadas. Siempre con los dos frenos.

3 – Frenada de reducción. Es la frenada para bajar la velocidad, que puede ir acompañada de reducción de marchas o no, pero sin detener la moto. Por ejemplo, al llegar a una curva. Puede estar, si conviene, precedida por la frenada de aproximación. Siempre con los dos frenos.

4 - Frenada preventiva.
Es la que se hace en preparación de una posible frenada más fuerte que aún no sabemos si vamos a tener que hacer o no.
Es iniciar la frenada muy suave, un ligero toque de frenos, a la espera de ver si soltamos frenos o seguimos frenando más fuerte. Por ejemplo, al llegar a un cruce y pasar por delante de un coche que llega y que nos tiene que ceder el paso pero no estamos seguros de lo que va a hacer. O al entrar en una curva ciega inclinando y frenando, por si aparece en medio algún obstáculo que nos haga frenar fuerte. En este último caso, al entrar frenando suave conseguimos, simultáneamente, que el efecto de
transferencia de masas hacia delante ya se haya producido parcialmente evitando así la posible sacudida si frenáramos más, que la inercia que se provoca hacia fuera al frenar ya la estemos compensando, y que el plazo de reacción para la acción de la frenada sea mucho más corto en tiempo, ya que esa acción ya la hemos hecho previamente. Siempre con los dos frenos, y en esta ocasión, es muy importante que los esfuerzos de ambas ruedas estén muy bien equilibrados, que ninguna empuje o estire a la otra.

5 – Frenada de corrección de trazada. Se hace con solo el freno trasero. Si entramos un poco pasados en una curva y notamos inercia hacia el exterior que puede dificultar la trayectoria escogida, al tocar el freno trasero la moto cierra un poco la trazada, a la vez que baja la velocidad, y ambas cosas nos hacen falta en ese momento. Hay que tener cuidado en no bloquear la rueda, y dar gas a la que hayamos conseguido el efecto deseado antes de que la moto se siga cerrando más, encarándola
hacia la salida.

6 – Frenada de tanteo de adherencia. Se hace con el freno trasero, a poca velocidad y sin nadie detrás, para notar la adherencia de un asfalto deslizante, si hay dudas sobre si está helado o tiene algo que perjudica la adherencia. No hace falta clavar la rueda, con un pequeño toque de freno ya se suele notar.

7 – Frenada de emergencia prevista.
Es la que hacemos cuando nos sale algún obstáculo que nos hace frenar con fuerza, en una situación que ya habíamos anticipado con una frenada preventiva. Como ya estamos frenando, la acción es inmediata y solo hay que tener en cuenta la dosificación, siempre con los dos frenos, y la inercia hacia el exterior, si es en curva. En mojado puede ser conveniente hacerla en dos o tres pulsaciones seguidas, salvo que la moto disponga de ABS.

8 – Frenada de emergencia imprevista. Es la que no contábamos con ella pero que algo o alguien nos obliga a hacer. Siempre con los dos frenos, dosificando bien la potencia y el reparto entre las dos ruedas, con especial atención a sujetarnos bien a la moto con los brazos amortiguando y con las rodillas apretando el depósito. En mojado será conveniente hacerla en dos o tres pulsaciones seguidas, salvo que la moto disponga de ABS.

9 – Frenada de calentamiento. Es la que hacemos varias veces al iniciar un tramo de curvas, para notar el tacto de la moto e ir calentando y compenetrando el conjunto moto / conductor, además de verificar que todo funciona. Siempre con los dos frenos.

10 – Frenada de entrenamiento. Es la que hacemos para practicar nuestra capacidad de frenar en distintas superficies o situaciones, incluso en curva. Siempre con los dos frenos.

11 – Frenada reflejo de otra. Es la que hacemos por acto reflejo cuando el vehículo que nos precede frena, es una llamada de atención. Siempre con los dos frenos.

12 – Frenada de ensayo. Es la que hacemos para probar unos frenos, unas ruedas, una moto... Se trata de una frenada de evaluación, y se ha de hacer de forma progresiva para no llevarse sorpresas. Con los dos frenos salvo que se esté valorando cada uno por separado.

13 – Frenada de secado. Tras lavar la moto o pasar por zonas con mucho agua, es una frenada para comprobar la frenada y en caso de notar pérdida de eficacia, hacerla tantas veces como sea necesario para secar los frenos. Mejor con los dos frenos a la vez.

14 – Frenada de aviso al de atrás. A veces no es frenar, sino indicar la posibilidad de que podemos hacerlo, si el otro viene cerca. Encender dos o tres veces la luz de freno llama la atención al que se acerca.

15 – Frenada de adecuación a la velocidad legal (radar). Frenada habitual en nuestros tiempos y peligrosa. Muchos, al llegar a un radar que ven en el último momento, frenan fuerte antes de mirar si tienen a otro vehículo cerca, lo que provoca accidentes. Mejor circular a velocidades legales y evitar esas situaciones de riesgo.

16 – Frenada de situación de parada. Es la que aguanta la moto si está parada en una pendiente, suele ser con el freno delantero si tenemos los pies en el suelo.

Métodos (Fases) de frenado. Hay tres fases en cualquier frenada, que son:

Aproximación de las pastillas de freno a los discos. Es el recorrido de la maneta o pedal de freno desde su posición de reposo hasta que empiezan a actuar, ese recorrido se puede hacer rápido sin problemas.

Inicio de la zona de fricción. Es el momento en que las pastillas de freno empiezan a tocar a los discos, y en el que hay que dosificar la fuerza de la frenada para igualar la acción en las dos ruedas y adaptarla a las circunstancias del momento (velocidad, adherencia, emergencia...). Si es necesario, se hace más de una pulsación para encontrar el tacto adecuado o para liberar momentáneamente los frenos si notamos pérdida de adherencia.

Zona de frenada intensa. Una vez dosificada la frenada y vista la posibilidad de frenar más fuerte si es necesario, se presiona para ajustar la distancia de frenado a lo que nos conviene. Puede hacerse en una o más veces, según la velocidad e intensidad de frenada que se necesite.

Posición de la mano en la maneta (palanca) de freno:

Si no se estima frenar en lo inmediato, es mejor y más cómodo llevar la mano sujetando el puño y no poner dedos en la maneta.
Una vez que se decide iniciar la frenada, la forma más recomendable de hacerlo es poniendo tres dedos sobre la maneta, con las funciones siguientes:

Dedo índice. Es el que queda más cerca del eje de giro de la maneta, y por tanto el que tiene menos brazo de palanca. Sirve para iniciar el recorrido y ayudar a los demás, aunque dada su posición es el que tiene menos tacto y tiene más difícil el hacer presión.

Dedo corazón. Ya queda más separado del eje de la maneta y situado en la zona central de la misma, con lo que puede hacer bien el movimiento de aproximación y dar la fuerza necesaria.

Dedo anular. Es el que queda más alejado del eje de la maneta y el que tiene más brazo de palanca. Por su posición, es el que tiene más tacto fino, por lo que será el que se ocupe de dar el toque de precisión en las frenadas delicadas.

Existe la creencia de que con uno o dos dedos se pueden dosificar mejor las frenadas y es más difícil pasarse frenando, pero en la práctica veremos que no es así, porque usando todo el brazo de palanca de la maneta y repartiendo bien el esfuerzo entre tres dedos, se consigue mayor precisión junto con una mayor velocidad de actuación.

Dosificación:

Frenando con los dos frenos, el delantero es el más eficaz y el que hace la mayor parte del trabajo. Cuanto más intensa es la frenada, más peso va a ir a apoyarse en la rueda delantera, quedando la trasera con menos peso y hasta con ninguno.
Si además, a la frenada le añadimos la reducción de marchas, será fácil que la rueda trasera quede bloqueada, provocando un patinazo que muchas veces va acompañado de rebotes. Por eso hay que repartir bien el esfuerzo entre ambas ruedas, y lo ideal es
no forzar tanto la frenada como para que esa liberación de peso de la rueda trasera afecte a la estabilidad. En buena medida eso se puede compensar poniendo más dura la precarga de la horquilla, para que el apoyo sea más consistente y no se hunda tanto.

En mojado, en las frenadas es importante conseguir la misma fuerza de deceleración en ambas ruedas, de forma que ninguna mande sobre la otra sino que se complementen bien. Así, el esfuerzo que recibe el chasis de la moto queda repartido entre los dos puntos de apoyo y no provoca ningún efecto negativo en el comportamiento natural de la moto rodando.

La frenada más cómoda suele ser la que, siendo con los dos frenos, se inicia la frenada con el trasero para que el peso de la moto quede retenido y no se vaya hacia delante, e inmediatamente después se frena con el delantero equilibrando la frenada entre los dos. Esto especialmente importante en la conducción cuando se lleva pasajero.
Pero es para seco, porque para mojado es más seguro iniciar la frenada con los dos frenos a la vez, para evitar el posible deslizamiento de la rueda trasera al frenar ella sola inicialmente, lo cual nos complicaría los planes de frenada.

En las motos con frenada combinada, parte de las cosas que he explicado aquí ya las hace la propia moto. Con ABS, lo correcto es frenar como si éste no estuviese, es decir, evitar el bloqueo de ruedas igualmente y dejar el ABS para compensar un error o situación de emergencia.

¿Frenar o esquivar?
Cuanta más potencia (brusca) sea la frenada, más difícil sera el esquivar algo.
O dicho de otra manera más técnica: La frenada, en cuanto a potencia, será inversamente proporcional a la maniobrabilidad de la moto para conseguir esquivar algún objeto u obstáculo.

Consejo: Aprende, y muy bien, a frenar mucho, para luego, frenar poco.

Entre esas dos palabras, frenar y esquivar, sus interferencias, momentos de aplicación, y extenso conocimiento de ambas por separado y a la vez, está la clave para evitar la mayor parte de los accidentes graves.

Saludos a todos los que lean esto...

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