viernes, 17 de mayo de 2019

¿Cuándo fue la última vez que realizaron una verificación del correcto funcionamiento de sus motos?


Estoy realmente convencido de que el correcto mantenimiento y el buen estado de los elementos de una moto influyen positivamente en nuestra seguridad.
De igual manera que ocurre con nuestros teléfonos, computadoras  u otras herramientas de uso cotidiano, una limpieza y revisión general cada cierto tiempo no sólo permitirá que disfrutemos de ellas más tiempo, sino también mejor.

En esta publicación quiero aprovechar mostrarles el “restyling” de la ex-CAPRICHOSA… jajaja. Hablo de mi pequeña moto bicilíndrica 250cc. Le hicimos un mantenimiento y remodelación completa este mes…  Las fotos que incrusto dentro del texto son justamente de parte del proceso…

El estado de la calle, el del conductor y el de la moto son factores claves a la hora de prevenir un siniestro. Siempre es buen momento para realizar una revisión, independientemente de la edad de la moto o del trayecto a realizar.



La crisis económica actual por no decir la era macri… jajaja… , ha lastrado en gran medida la edad de nuestro parque móvil en motos de mediana y gran cilindrada, en el que encontramos motos más antiguas y menos seguros en circulación, razón por la cual resulta más importante garantizar su buen funcionamiento. Por ello soy de pensar que aunque hinche las bolas la famosa VTV algo bueno tiene… quitar de las calles motos y autos inseguros… (Aunque lo que veo día a día sea un desastre… autos atados con alambre, motos sin luces ni patente, y cosas peores)

Por todo ello, es necesario dar un paso adelante e incorporar a nuestro día a día un mínimo de atención al mantenimiento de nuestra moto: pequeños pasos cada poco tiempo nos puede ahorrar un disgusto a más largo plazo. Cuestiones como en nivel de los líquidos, la presión de las ruedas y los elementos de visibilidad pueden ser algunos de los grandes olvidados, a pesar de su relevancia en la prevención de los accidentes de tráfico.

Como digo, en primer lugar, me gustaría destacar la importancia de regular a unos niveles estables el líquido de refrigeración o anticongelante. Si el motor no está bien refrigerado puede sufrir un sobrecalentamiento, por lo que es recomendable revisar el estado general del sistema (de posibles fugas). Muchas motos actualmente y las de baja cilindrada se refrigeran por aire… y bueno, aire siempre hay… sucio pero hay. Jajaja.

La presión de las ruedas supone un factor importante a tener en cuenta durante la revisión de los neumáticos, en los que debemos asegurarnos de su puesta a punto una vez al mes…, así evitamos la cristalización de las gomas debido a las inclemencias climatológicas, probabilidades de reventón, reducción del agarre o falta de precisión en los giros y tumbos, etc.

No olvidemos revisar que todas las luces de la moto funcionen correctamente, especialmente si vamos a viajar de noche. Esto incluye las de posición, las bajas, las altas, las de freno y los intermitentes o guiñes. (Sí, yo los llamo “guiñes” como Pablo Imhoff más conocido como Pablito Viajero )

El filtro del aire es recomendable cambiarlo anualmente, y digo “cambiar” y no limpiar, pues resulta mucho más efectivo. Un filtro sucio puede provocar mala combustión (introduce más combustible y menos aire), por la obstrucción que ejercen las impurezas.

Continuando con el asunto “líquidos”, el aceite y el filtro de aceite, se deben renovar de igual modo de forma más o menos habitual. De este modo impedimos que el aceite se licúe, perdiendo sus propiedades provocando una mala lubricación y un desgaste prematuro de las piezas metálicas. Con un nivel aceptable de pureza del aceite mantendremos también el motor limpio.

Las pastillas de freno (yo la tengo solo en la rueda delantera) son otro de los elementos que, por su uso, más se deterioran y más en peligro pueden ponernos. Para sustituirlas en casa es necesario quitar las ruedas para acceder a su posición. Cuando las pastillas se desgastan, debemos hacer más esfuerzo al frenar, se recalientan y resulta más difícil refrigerar, provocando así consecuencias en otros aspectos de la moto. El líquido de freno y la bujía hay que sustituirlos (al menos eso hago yo). En cambio, para el disco de frenos y los amortiguadores solo será necesaria una revisión para comprobar sus estados.

Existen elementos “invisibles” que pueden fallar y es en un taller especializado o en la famosa VTV quizás en donde pueden revisar su estado. Hablamos, entre otros casos, del tubo de escape y sus niveles de emisiones, pero también la cadena.  


Me despido como siempre dejando un abrazo y un deseo...
Buena vida, buena ruta.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Comenta...